Actividad Física: Ejercicio físico y... más, mucho más

Se dice que uno de los problemas principales de los niños de hoy en día es la obesidad, y que esta existe como consecuencia, a parte de una mala alimentación, y otras muchas cosas, de la poca actividad física de los niños. En el colegio solo son obligatorias dos horas diarias de Educación Física y ellos, aunque algunos están apuntados a deportes extraescolares, prefieren quedarse en casa jugando a la video-consola en vez de jugar en el parque (Algo de lo que también son responsables los padres).

Y de repente surge la solución. Ahora, algunas video-consolas, presentan un nuevo aparato revolucionario que permite interactuar al usuario realizando ejercicio físico. Con esto, en principio, se acallan las quejas dirigidas que rezan que la tecnología favorece el sedentarismo. Una vez más, la tecnología se ha puesto al servicio del hombre para aportar una nueva y sorprendente solución.

Pero ¿realmente la tecnología se ha puesto al servicio del hombre en este caso? Me pregunto ¿es lo mismo actividad física que ejercicio físico? Dejando a un lado las definiciones científicas propias de la materia, en el caso que nos ocupa, vemos como este nuevo aparato, más que favorecer el ejercicio físico actúa como paliativo de la falta de este. Porque la actividad física no se puede entender como, únicamente, ejercicio físico. La actividad física incluye a las relaciones sociales, tan indispensables en un ser tan social como es el ser humano, incluyen el contacto con la naturaleza y su interacción con esta e incluyen la exploración, el conocer el entorno que nos rodea, el salir fuera de casa para respirar aire o entrar en contacto con el Sol (contacto, por otro lado, indispensable para tener un buen estado de salud).

Hace poco un amigo, informático, que trabaja desde casa con gente de todo el mundo, me decía que no es tan idílica esta situación, y yo le creo. Tecnología si, por supuesto, pero al servicio del hombre. No confundamos progreso tecnológico con progreso humano. Como maestros aprendamos las nuevas tecnologías, aprendamos a enseñarlas y enseñémoslas, lo cual lleva implícito conocer y saber dar a conocer cuales son sus límites, virtudes y defectos.

Aristóteles dijo: “En el término medio está la virtud”.